Por Libby Rose

El intendente de Tupungato habló en exclusiva para El Cuco Digital y enfatizó en que hay que atender el aparato productivo antes de que las consecuencias sean severas.

El 20 de marzo Argentina entró en cuarentena y dsde hace casi un mes, muchas actividades están frenadas, aunque se irán flexibilizando conforme transcurran las semanas. En los últimos días, cuando el presidente Alberto Fernández anunció la extensión del aislamiento social, preventivo y obligatorio, se habilitó el trabajo de algunos rubros.

Para enfrentar la crisis y el estancamiento productivo que atraviesan países en todo el mundo frente al avance del coronavirus, desde el Gobierno Nacional y provincial debieron lanzar ayudas económicas.

Sin embargo, para algunos dirigentes, atender la economía es una cuestión urgente para evitar mayores consecuencias.

En ese sentido, el intendente de Tupungato, Gustavo Soto, habló con El Cuco Digital y tomó postura frente a la situación que se vive en el país.

“Es cierto que en Mendoza estamos en una situación especial donde hay que sacar las cosechas a flote. Está terminando la cosecha de la uva, firme creo que le queda una semana más. Estamos en plena cosecha de la nuez que se va a estirar hasta fines de abril, principios de mayo y otros productos de la zona como las papas, el ajo; se está procesando lo que se cosechó en diciembre, y plantando de febrero hasta seguramente finales de mayo. Quienes trabajan son personas del Valle de Uco, y teniendo en cuenta que no hay contagiados, tal vez se podría pensar que a fines de mayo, podamos tener alguna flexibilización más de las que ya tenemos”.

El mandatario hizo hincapié en la necesidad de reactivar la economía lo antes posible, aunque teniendo en cuenta las medidas sanitarias que se establecen en medio de la pandemia.

“Por más ordenados que estemos, las finanzas ya empiezan a crujir. Hay que cumplir con el compromiso de salarios primero y de la logística que hay que aplicar para esta situación. Entonces hay que ir si o si pensando en un plan económico que, sin salirse de los cánones sanitarios establecidos, empiece a darle también alguna posibilidad a la economía, a buscarle la “vacuna económica”, sostuvo.

“Vamos pasa a paso, no cantemos victoria, aunque estamos bien, o muy bien, creo que aún falta mucho para tener una medida exacta de dónde estamos parados. Y tendremos que aprender a convivir con el virus, esto lo sé. A la economía hay que empezar a moverla porque ya está haciendo un daño fuerte en la parte privada, en los cuentapropistas, monotributistas, independientes que necesitan de la diaria” manifestó Soto.

“Este parate económico que ya lleva casi dos meses, sumado a la caída de la provincia, más temprano que tarde, afecta mucho. Tupungato siempre ha ahorrado haciendo un enorme sacrificio, pero tarde o temprano eso se termina”.

“Hoy nadie, que debería tener seguro su sueldo, puede decir que está salvado. La pandemia económica también va a afectar a todos en distintas medidas y tiempos pero en realidad, a todos nos va a golpear así que también hay que ir pensando el flexibilizar el trabajo en todo los lugares del país y movilizar la economía”.

Soto además fue crítico con la implementación de medidas en términos de tiempo y cuestionó la “falta” de un plan de acción por parte del Gobierno Nacional.

“La cuestión ahora es ver si realmente había un programa económico productivo. Acá viene el desafío ahora. Hay que pensar si había un plan económico o no había nada y en esto, muy sinceramente, lo tengo que decir, así como apoyo las medidas del gobierno nacional en cuanto al coronavirus, creo que se demoraron un mes casi. Se podría haber evitado desde enero no solo la entrada a la Argentina sino también la salida de gente que ha tenido que ser repatriada”.

“Hay que ponerse a trabajar y en eso no hay diferencias pero, en lo otro, mis temor es, bien entrado febrero, ¿Cuál era el plan económico? ¿ Había alguna idea? Se pensaba en la deuda pero no en decirle al banco ‘No te puedo pagar porque tengo este problema pero si me das posibilidades de pagar de esta y esta manera (…)’. Eso no estuvo en la mesa”, cuestionó el cacique tupungatino.

“Hay que ir haciéndose la idea de que el virus está, hay que ir tomando precauciones, quizá extremándolas  en el contacto permanente de la gente, cambiar los hábitos afectuosos que tenemos como latinos que somos, pero la economía tiene que reactivarse y sinceramente no veo que haya un plan definido de cómo se va a hacer eso”.

“Me preocupa la salud porque me preocupa la economía y me preocupa la economía porque me preocupa la salud. Hay que atender las dos cosas paralelamente. Ahora tenemos que reactivar y poner a funcionar el aparato productivo. Dentro del cumplimiento estricto de las medidas sanitarias, si o si hay que atender las medidas económicas porque después va a hacer mucho más daño porque entramos en un circulo vicioso: si no tenés para comer, no tenés para el jabón. No hablemos de alcohol en gel, de barbijos de alta gama, hablemos de lo más sencillo, tener agua, jabón, y un planto de comida para estar fuertes”, puntualizó.

“Para mantener eso básico hay que tener un salario y ese salario se obtiene por trabajo. Hay que aprender que el trabajo y la producción, poner el marcha el apartyo productivo, es mi opinión”, agregó.

La semana pasada, Tupungato habilitó edificios alternativos para ser usados en caso de que la pandemia avance. El Hotel Turismo y el Regimiento de Infantería 11 son algunos de los espacios que podrán ser utilizados en caso de que hayan pacientes con COVID- 19 en el departamento y que no puedan hacer el aislamiento en sus casas por condiciones edilicias o hacinamiento.

“Las precauciones las tomamos porque hay que tomarlas y las mostramos para que la gente se sienta contenida y segura” completó Soto.