Buscan que calles de Tunuyán lleven el nombre de personas que han dejado huellas en el departamento

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Se trata de cuatro vías ubicadas en los barrios San Antonio, Unexpo y Precursora, que al momento no tienen identificación. Proponen que se llamen Amanda Matilde Daruich, Palmira Riera, Blanca Edith Salvagno de Segura y Blanca Edith Salvagno de Segura.

El pasado 10 de marzo, concejales del Bloque Frente Cambia Mendoza de Tunuyán presentaron un proyecto de ordenanza para que calles de los barrios San Antonio, Unexpo y Precursora, lleven el nombre de personas que han dejado huellas en el departamento.

La propuesta argumenta que dichos barrios fueron finalizados “en el año 2007 y hasta la actualidad no cuenta con el nombre de las distintas calles” por lo que “vecinos de esta comunidad solicitan que se les dé denominación, ya que se les dificulta a la hora de recibir notificaciones como las boletas de impuestos, pedidos, cartas y todo lo que requiere contar con un domicilio legal”.

Teniendo en cuenta ello y a la vez la necesidad de revalorizar a personas que han marcado la historia departamental, los ediles solicitan que cuatro vías de esos barrios, paralelas a calle Argentina hacia el sur entre las intercesiones “Avenida Guisasola y Maxi y Cynthia Pedron”, lleven los nombres:

  1. Calle uno “Amanda Matilde Daruich”
  2. Calle dos “Antonio Vendrell”(Ordenanza ya existente 2418/12)
  3. Calle tres “Palmira Riera”
  4. Calle cuatro “Blanca Edith Salvagno de Segura”
  5. Calle cinco “Jesús Cangas Isla”

Historia de cada una de las personas

Amanda Matilde Daruich

Amanda nació el 14 de marzo de 1942, fue una mujer activa y representativa dentro y fuera del departamento de Tunuyán. Docente con vocación de servicio que supo dejar huellas a lo largo de su trayectoria.

 Se desempeñó como:

  • Maestra y directora de Educación primaria en escuela Nº 1-115 República Argentina del distrito Los Sauces.
  • Directora- maestra en Centro de Educación Básica de Adultos Nº 3-017 Ricardo Levene.
  • Directora de Cultura de la Municipalidad de Tunuyán en el año 1986.
  • Presidente de la Asociación de Mujeres de Negocios y Profesionales de Tunuyán.
  • Presidenta de Asociación y Mutual Educadores Provinciales Jubilados filial Tunuyán. 
  • Miembro activo de la Asociación de Mujeres de Negocios y Profesionales a nivel Nacional e internacional.
  • Activa representante y delegada de Casa del Maestro en Tunuyán.

Fue premiada como:

  • Mujer destacada por la Asociación y Mutual Educadores Provinciales Jubilados por su compromiso y actividad continúa.
  • Premio “Trayectoria y Compromiso Unión Cívica Radical” 2016. (post mortem).

Falleció el 24 de junio de 2016.

Palmira Riera

Su trayectoria como docente y luego como supervisora fue muy clara. El servicio pleno hacia los más desposeídos, el darle no solo formación intelectual sino también emocional, encontrando en ella el amor y cobijo que muchas veces faltaba.

Con el advenimiento de la democracia, en 1983, no dudo en afiliarse a la Unión Cívica Radical.

Ya retirada de la docencia fue concejal y renunció a su jubilación en esa etapa ya que no admitía tener dos sueldos del Estado.

Palmira vivió más de 30 años en el barrio Urquiza y fue integrante miembro de la comisión de la unión vecinal de ese barrio hasta terminar sus últimos días de vida.

Blanca Edith Salvagno de Segura “Doña Chichí”

Nació en la Estancia El Zulupe, cerca de la localidad de Naschel, San Luis, el 9 de julio de 1933. Más conocida como Doña Chichi, tenía un carácter especial y siempre estaba dispuesta a servir a los demás. Sin dudas una gran docente, una gran mamá, una gran persona de bien.

Se crió en el campo junto a sus padres, don José Salvagno y Doña Blanca Domínguez, y sus hermanas “Monona” y “Pocha”; cursó sus primeros grados en la Escuela de Naschel y luego, toda la familia, se mudó a Villa Mercedes-San Luis, para que las niñas pudieran continuar sus estudios, por cierto como docentes las tres.

En el año 1951, se recibió de maestra en la Escuela Normal de Villa Mercedes y su primer trabajo como docente, aunque no era para ella un trabajo sino una forma de vida, fue en San Pablo un pequeño paraje al norte de Tilisarao en la provincia de San Luis. Continuó su labor educativa, en el Hogar Escuela “Eva Perón” de la ciudad de Villa Mercedes-San Luis.

En el año 1960 fue nombrada como maestra titular de grado, en la Escuela Nacional Nro 72 “Paula Albarracín”, en la localidad de Batavia a unos 170Km al sur de Villa Mercedes-San Luis. Allí conoció al entonces jefe de Correos, don Raúl Segura, con quien se casó y tuvieron tres hijos, José, Laura y Horacio. En Batavia, ejerció la docencia en tres etapas discontinuas, hasta el año 1973; por traslados de su esposo a Las Cuevas y a Godoy Cruz-Mendoza, donde también se desempeñó como docente.

En el año 1974, la familia se trasladó a la localidad de Eugenio Bustos-Mendoza; ya nuevamente en la provincia, dio clases en la Escuela “Antonio Olivares” de Tres Esquinas, como así también en la Escuela Bernardo Quiroga de Eugenio Bustos. Estando en esta localidad y con 45 años ya, tuvo a su tercer hijo Horacio.

Para el 1982, una nueva mudanza de la familia, pero muy cerca, la lleva a su último lugar de residencia, Ciudad de Tunuyán.

Afincada en Tunuyán, ejerció la docencia en la Escuela Maestro Alberto Derani.

Ya jubilada, en su casa del barrio Unexpo/Precursora, continuó ejerciendo la docencia, pero ahora, ayudando a muchos niños a mejorar sus aprendizajes, durante largas horas y con una paciencia eterna, en el comedor de su casa y siempre, pero siempre a cambio de la única retribución, que ella llamaba “el placer de servir”.

Este amor por los niños y su fe inquebrantable en Dios, la impulsaba todos los años, aún con problemas de salud, a organizar en el barrio esas jornadas tan felices del Día del Niño.

Doña Chichi, después de una vida de sacrificio y con 87 años de edad, falleció el 11 de agosto de 2020.

Jesús Cangas Isla

El señor Jesús Cangas Isla llegó en el año 1920 a Tunuyán y se puso al frente de un hotel, inicialmente ubicado frente a la estación del ferrocarril, sobre la calle Francisco Delgado. Allí se albergaban los viajeros que llegaban al departamento en tren. Posteriormente lo trasladó a la esquina de calle San Martín y Rivadavia, cuyo nombre fue “Hotel Cangas”.

Jesús también fue propietario de unos de los baños termales, ubicados en Capiz, San Carlos. Allí asistía gran cantidad de personas, viajeros que estaban en el Hotel Tunuyán, y vecinos del Valle de Uco.

En el año 1935, el pueblo lo eligió como concejal del departamento, cargo honorable que desempeñó con gran compromiso y responsabilidad.

Al finalizar su gestión legislativa en Tunuyán, don Jesús se dedicó exclusivamente a la tarea de atender su emprendimiento hotelero, de esta manera contribuyó al progreso del departamento, con su espíritu pujante y previsor.

Sus hijos comenzaron a familiarizarse con el trabajo y la atención del Hotel, cuando al poco tiempo, un 15 de junio de 1955, falleció.

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