Por Libby Rose
Ana Florencia Davila cuenta como es la situación en el país que más refugiados recibe y donde está radicada hace casi 6 años.
El organismo de la ONU para los refugiados dijo este jueves que 1 millón de personas ya han huido de Ucrania desde el comienzo de la invasión rusa, hace una semana, un éxodo a un ritmo sin precedentes en lo que va del siglo.
Polonia, por su cercanía geográfica es el país que más refugiados está recibiendo y hay una campaña colectiva y gubernamental para prestar ayuda a las miles de personas que cruzan la frontera escapando de la guerra.
Ana Florencia Dávila es una pastelera oriunda de Tunuyán que vive en Polonia. Actualmente está trabajando a unos 300 kilómetros de Varsovia y es testigo de este hecho histórico que tiene en vilo a todo el mundo.
Tanto los propios habitantes como los gobiernos están asistiendo a ucranianos que llegan a ese país con alojamiento y cubriendo otras necesidades básicas como comida y medicamentos en medio del crudo invierno europeo.
“La misma gente polaca no solo le está dando refugio sino también que les está yendo a buscar a la frontera (…) Publiqué un video (ver arriba) de un amigo donde se ve que llegan a la estación de tren y los esperan con comida caliente”, contó Ana Florencia Davila en diálogo con El Cuco Digital.
“Hay alguien, que no sabemos quién es, que ha puesto a disposición su hotel, un hotel entero para que se queden a dormir”, detalló.
El gobernador de Varsovia trabaja mancomunadamente junto al presidente, ambos de diferentes partidos políticos y rivales en elecciones anteriores. De forma articulada están poniendo a disposición departamentos inhabitados para que sean ocupados por ucranianos.
Polonia y Ucrania son países interconectados permanentemente. Muchos ucranianos suelen ir a Polonia a trabajar ya que muchos polacos, que poseen pasaporte de la Unión Europea, se van a otros países del viejo continente a trabajar. Ahora el Gobierno acelera los trámites de visas para los refugiados.
“Toda la gente, directa e indirectamente está ayudando. Esperamos que todo se mantenga tranquilo en Polonia”, manifestó la tunuyanina que trabaja en una frábrica de chocolates frente a un aeropuerto militar.
“Veo los helicópteros salir desde acá (…) También he visto camiones trasladando medicamentos que es lo que más necesitan. En las farmacias hay cajas para colaborar. Comprás el medicamento y lo ponés ahí, yo hice eso el lunes”.
La red solidaria es tan grande que solicitan que no se envíen más donaciones a las fronteras. También la globalización tecnológica hace lo suyo y permite que muchos argentinos que viven en Polonia se organicen en las redes para ayudar a compatriotas que huyen de la guerra.
“La iglesia de hispanohablantes está recibiendo latinos La cantidad de donaciones es de tal magnitud que pidieron que por favor no se enviaran más a la frontera”, mencionó Ana Florencia, quien destacó sentirse “completamente sorprendida por la ayuda”.
Además los trenes son gratuitos desde Ucrania a Polonia y dentro de Polonia, campaña a la que se suman empresas privadas de transporte como Uber.
“Hoy leí que Uber también hace viajes gratis desde la frontera con Ucrania hasta Rzeszów, una ciudad polaca”, cerró la tunuyanina.
¿Cuál es el origen de la guerra entre Rusia y Ucrania?
La expansión de la OTAN y el desarrollo militar de Ucrania activó las alarmas del Gobierno ruso que el pasado 24 de febrero ordenó atacar la región de Donbás.
Desde entonces las tropas rusas han atacado desde ese día varias regiones del país, incluida la capital de Kiev y Jarkov, donde murieron al menos 11 personas a raíz de un bombardeo.
Los recientes movimientos despiertan el fantasma de la Guerra Fría. El trasfondo de esta crisis es la negativa rusa a aceptar el acercamiento de la OTAN y de la Unión Europea a la antigua república soviética, a la que Moscú considera parte de su identidad y de su espacio de influencia, y cuyo control juzga vital para su seguridad. Putin cree que ambos países conforman “un solo pueblo”.
